Este mensaje corto pero fuerte y que da opción a muchas interpretaciones y cada nivel de consciencia lo aprecia según su percepción, revela la evidencia de las existencias de fuerzas negativas y destructivas. Parece un juego de la creación que no es del agrado de la mayoría que sufren los llamados poderes demoniacos.

Las poderosas leyes de la naturaleza encarnadas en diferentes funciones como Brahmā, Vishnu y Shiva de alguna forma permiten que la negatividad crezca y luego haga sus destrozos.

Poseer el conocimiento hace que el ser humano no tenga miedo. Mientras se está en el camino de ganar el conocimiento completo de la vida, tener confianza y seguridad en sí mismo son potentes herramientas para levantarse de las posibles caídas o saber contener la ira de los Rākshasas (demonios en la literatura védica).

El cobijo en el campo trascendental, en el Ser, es la mejor cueva para dejar pasar las situaciones tan adversas y luego salir con más fortaleza para no desviarnos del buen camino que debemos seguir.

Permitir la existencia de las fuerzas negativas se considera como la batalla a ganar. Saber que en cualquier momento puede aparecer esa maldad, y sin saber por qué ha aparecido, nos invita a mantener nuestra firmeza en el camino de la evolución.

Hasta que no se alcance la Iluminación por algún lugar oscuro se pueden colar y nos zarandea. En el estado de Iluminación donde la presencia del Ser es todo lo que habita en nosotros no existe ninguna posibilidad para que la negatividad se cuele en nuestras vidas. Por tanto, esto es una invitación a seguir y seguir hasta que alcancemos la Iluminación que es nuestro poderoso derecho de nacimiento.

No basta haber dado grandes pasos y estar en un gran nivel evolutivo, es necesario alcanzar la Iluminación, porque incluso estando cerca nos podemos endiosar, dar muestras de poderíos y quedarnos ahí. Hay que evitar hasta un coscorrón que nos deje inconscientes o ensueño y perdamos la realidad del Ser.

El Creador lo supo hacer, y supo rápidamente que los engreídos se multiplican cuando tienen éxito en el mundo material, dinero, casas

Hay que aprender, y no olvidarse, que debemos retirarnos en el Ser, y desde allí realizar la acción. La pureza de la acción nos evitará sufrimientos.

Cuando actuamos con maldad estamos alimentando a las fuerzas negativas. Cría cuervos y te sacaran los ojos.

El Creador nos invita a realizar el propósito de nuestro nacimiento. Como decía Jesús: “Sed perfectos como vuestro Padre Celestial lo es”