En el primer impulso de la ley natural están contenidas todas las leyes que gobiernan las diferentes divisiones de la creación. Un delicado y tierno impulso crea todo con total perfección, así fue la Voluntad Primordial que se repite una y otra vez. 

Se puede confundir perfectamente la voluntad con el deseo. A nivel humano, la voluntad nace del silencio del corazón y los deseos podrían nacer fácilmente en el murmullo e intereses de la mente.  La voluntad primordial crea pureza porque nace de la pureza, los deseos pueden estar sometidos a muchos intereses o caprichos personales, por eso hay deseos que traen buenas consecuencias y otros traen nefastos resultados.

Ciertamente todo lo que se proyecta en la mente da sus frutos, unas veces dan frutos ricos y otras las llamadas “calabazas”.  Allí donde se pone la atención, allí se crece; esto quiere decir que esa atención o enfoque que estemos tomando tendrá un resultado positivo si el deseo era positivo y si los deseos carecen de base coherente puede pasar cualquier cosa.

La voluntad es el principal motor de la vida, cualquier cosa se puede conseguir con una buena voluntad. Cuando la voluntad es buena pero los medios al alcance no son favorables sucede un principio muy interesante y es que la naturaleza favorece las voluntades puras. Las leyes naturales reaccionan y favorecen los impulsos personales que promuevan vida y bienestar en todas partes.

La naturaleza ayuda a la acción individual cuando la voluntad personal está en consonancia con la voluntad primordial. Llegar al nivel donde comienza a moverse la voluntad es muy fácil pero el método tiene que ser de lo más simple e inocente, porque la voluntad es inocencia pura.  Para llegar a ese nivel se necesita regularidad en una práctica sencilla y que carezca de manipulación personal o espejismos mentales. La falsedad mental o emocional es una herramienta muy en uso, es un autoengaño que llega a confundir a la propia persona. Cada voluntad tiene su matiz personal, cada uno tiene sus tintes personales, de ahí los riesgos de nuestro libre albedrio, la visión de la vida es diferente en diferentes estados de consciencia.

Ahora bien, cuando la consciencia trasciende los torbellinos mentales y luego entra en los estadios más finos y tiernos de la mente, se gana tal pureza que la voluntad personal es dulcemente entregada a la voluntad del creador.

“Que se haga Tu Voluntad” quiere decir que la voluntad del creador es la que actúa sobre la voluntad personal, algo así como decir que las riendas del carruaje de nuestra vida son llevadas por la voluntad del gran Hacedor. El personalismo desaparece, como la visión estrecha y los deseos egoístas no tienen cabida, nada más existe, es la Voluntad Primordial.

Aprender la tecnología de la inocencia es fundamental. Las pretensiones individuales fácilmente miran más hacia uno mismo que al beneficio colectivo.

La Ciencia Védica tiene su tecnología: la Meditación Trascendental. Se aprende a trascender el nivel superficial de la mente y de forma fácil e inocente regresas a aquello que eres pura VIDA, tu auténtico nivel BIO, por eso eres VEDA, creado para gozar un conocimiento completo, vivir en el Ser y disfrutar de lo creado, que nuestra esencia domine lo creado. 

Porque todo lo que se cree, todo lo que se cultive, debe venir de una voluntad pura y que beneficie a todos, que no dañe nada ni a nadie. 

La palabra BIO en griego significa VIDA. VEDA es el conocimiento completo de la VIDA.  Bio es Veda. El cuerpo humano es VEDA, el sistema nervioso humano es totalmente BIO, por eso desnaturalizarlo es una torpe acción.

La distinción es mayor cuando la sensibilidad es mayor. La distinción de los alimentos es fundamental para seleccionar aquello que es saludable.

La sensibilidad debe acompañar a todo lo que se crea, a todo lo que se cultive. Tener un alto nivel de sensibilidad es tener un alto nivel de Consciencia, capaz de apreciar la Conciencia como la base de todo lo que existe.

No todo lo que crece es válido, no todo lo que se cultive es saludable para el cuerpo humano. El ser humano es especial, y si eso no se valora entonces cualquier cosa podrá tragar.

El mundo va como va por el abandono personal. Es vergonzoso mirar las cosas que se hacen es este precioso planeta. 

El abandono personal crea ceguera hacia uno mismo, ve solo la materia, incluso mira su cuerpo como materia. El Materialismo domina y la esencia pura de VIDA permanece oculta. 

La Ciencia Védica restaura la VIDA con su tecnología MEDITACIÓN TRASCENDENTAL. Lo material aspira a tener más crecimiento material. Decir Ser Humano es decir VEDA, es lo mismo. 

BIO, la Vida, ha creado todo desde la Ley Natural.
El Ser Humano es la imagen del mejor cultivo creado, a semejanza del Creador.
BIOesVEDA, está a su servicio para restaurar la Vida Humana, para recuperar lo mejor.

Un abrazo familiar.
Nerja, 3 de diciembre de 2024